El Parque de los Príncipes albergará uno de los duelos con más morbo de los octavos de final de la competencia. El ex capitán azulgrana se reencontrará con viejos rivales, mientras que Mbappé deberá hacer un buen papel contra su posible futuro equipo.
El Real Madrid visitará éste martes el Parque de los Príncipes para enfrentar al PSG en uno de los duelos más esperados por los fanáticos del fútbol mundial. Un encuentro que tendrá muchos condimentos entre ellos dos sobresalientes: ver a Messi nuevamente en acción contra el cuadro merengue y el morbo de Mbappé enfrentando al que podría ser su próximo equipo.
Por el presente que atraviesan ambos clubes, se podrá ver un bloque contra una plantilla. Un equipo afianzado y con experiencia dentro del certamen europeo frente a una constelación de estrellas liderada por un Mauricio Pochettino que todavía no logró implementar un sello característico de juego.
Frente a él estará Carlo Ancelotti, que supo adueñarse del vestuario y levantar el rendimiento de un Real Madrid que se quedó sin nada por luchar durante el último paso de Zinedine Zidane en el banquillo.
Con la llegada del técnico italiano el equipo ha encontrado la regularidad en Liga para aspirar a dar un salto en la Liga de Campeones. Acabó líder de grupo y el sorteo le emparejó con el rival que no deseaba.
El destino fue caprichoso y la repetición de los emparejamientos cambió el rumbo madridista en la Champions. De encarar una eliminatoria de una exigencia teóricamente menor, ante el Benfica, pasó a uno de los duelos estelares del fútbol europeo.
Llega a la cita el técnico italiano con su equipo de gala. Pendiente hasta el último segundo de las sensaciones de su gran referente, Benzema, recuperado a contrarreloj de su dolencia muscular en los isquiotibiales izquierdos.
Todo apunta a la presencia del experimentado delantero galo en el Parque de los Príncipes. Sin embargo el técnico italiano cuenta con varios planes de respaldo, entre los que destacan nombres como el de Gareth Bale, la figura de ‘falso nueve’ con Isco, o los delanteros centros puros como Luka Jovic o Mariano Díaz.